Colón y Unión quedaron en deuda: 0 a 0

Colón y Unión empataron 0 a 0 en una nueva edición del clásico de Santa Fe. El Tate fue más ordenado pero careció de profundidad. El sabalero no pudo encontrar el partido en ningun momento. Un partido que quedará solo en la estadística.

En los primeros segundos Unión salió a atorar a Colón, lo que lo llevó a tener una jugada clara desde la cabeza de Botinelli, quien saltó muy solo pero el balón se fue rosando el ángulo derecho de Burian.

A partir de allí Colón entró en partido y la cuestión fue de igualdad. Es cierto que Unión manejaba la pelota, algo que el sabalero no podía hacer, pero todavía no tenía la profundidad necesaria para tener chances claras.  

En la previa se habló mucho de la presencia de Nereo Fernández, quien no pudo llegar físicamente al partido. Su reemplazante fue Joaquín Papaleo, que en su primera intervención tuvo una floja salida y debió ser reemplazado porque recibió un pelotazo en su ojo izquierdo. En su lugar ingresó Marcos Peano, también hizo su debut en Unión en un clásico.

Los de Domínguez comenzaron a llevar peligro al arco de Peano desde los pies de Correa pero sin demasiado éxito. En más de media hora el partido no entregó demasiadas emociones, solo intentos y aproximaciones.

La fricción llevó a un choque de cabezas entre Ortiz y Soldano cuando se disputaron una de las tantas pelotas aéreas del partido. El cuerpo médico sabalero le colocó un gorro de nadador a Guillermo Ortíz debido a que sufrió un corte en la jugada mencionada.

Sobre el final del primer tiempo los de Madelón fueron más que Colón, pero sin capitalizarnada. En la primera parte el equipo visitante fue un poco más que el local.

El segundo tiempo no propuso demasiado, en comparación al primer tiempo, por momentos, fue más trabado y disputado. El rojiblanco mandó a la cancha a Gallegos en lugar de Troyansky para intentar torcer la historia. El delantero lo tuvo luego de un cabezazo de Botinelli pero no pudo rematar. Cerca de la media hora ingresó Droopy Gomez por Fragapane.

Por su parte Domínguez envió al campo de juego a Bernardi y Chancalay en lugar de Leguizamón y Heredia. Para intentar tener más peso ofensivo y cambio de ritmo. El Polaco Bastía intentó de media distancia cerca de la media hora, lo que marcó la primera jugada de riesgo del segundo tiempo.

El partido se fue diluyendo y se cayó a pedazos. Sin emociones, con muchísimas infracciones y por momentos aburrido, Colón y Unión empataron sin goles en la edición 90 del clásico santafesino.