Se normalizó el acceso al puente por la avenida Irigoyen

Este mediodía quedó habilitado el tránsito por la avenida Intendente Irigoyen. Exactamente a las 11.40 pasaron los primeros vehículos de ambas manos. Aplausos de los obreros y bocinazos de los automovilistas celebraron la habilitación de la avenida que conecta la ciudad de Santa Fe con el Puente Carretero. 
En ese marco, Carlos Pereira, secretario General del Municipio, indicó que con la habilitación al tránsito “terminamos la primera etapa de la intervención que implicó hacer este puente. Porque para que podamos conectar los barrios Chalet con el Centenario decidimos que era necesario perforar el terraplén que está debajo de la avenida Intendente Irigoyen y que conecta la rotonda de Colón con el Puente Carretero”. 

En esa línea, Carlos Pereira detalló que los trabajos que se realizaron durante esta primera etapa incluyeron “la construcción de un verdadero puente, que es lo que concluimos hoy. Por tal motivo los vehículos pueden retomar la circulación habitual”. Y recordó que resta “la conexión entre los dos barrios, que va por debajo del puente y que va a demandar otros dos o tres meses de trabajo”. 

“Estamos muy contentos con el personal de la Secretaría de Obras Públicas que diseñó esta obra; la empresa trabajó dentro de los términos previstos, y los vecinos dan fe de que los trabajadores estuvieron hasta altas horas de la noche para que el tránsito se pueda habilitar en forma rápida”, destacó Carlos Pereira. La construcción del puente, que mide 18 metros,  demandó trabajos de pilotaje, que son columnas de 80 cm de diámetro a 15 metros de profundidad, cabezales y el montaje de las vigas para luego poder hacer la losa del tablero, que incluye la calzada y las veredas del puente. 

Como dato, cabe mencionar que el puente está calculado siguiendo las normativas previstas por Vialidad Nacional correspondientes a uno de tipo "A30". Esto corresponde a un viaducto resistente para el paso de camiones de 45.000 kilos de carga bruta. 

Conexión vial 

Con respecto a las tareas pendientes, Carlos Pereira detalló: “La conexión vial que unirá Chalet y Centenario tendrá, por un lado, dos carriles de ida y vuelta para tránsito vehicular y, por otro lado, tendrá espacio para peatones y bicisenda. Los trabajos demandarán dos o tres meses más”. En esa línea, el funcionario añadió “que la obra contempla la intervención de pavimentación y construcción de cordón cuneta que se está haciendo fundamentalmente en barrio Chalet”. 
El viaducto, que permitirá vincular las calles Roque Sáenz Peña e Independencia, forma parte de una inversión cercana a los $ 130 millones que comprende además trabajos de pavimentación, alumbrado y cloacas, para San Lorenzo y Arenales.

Cabe recordar que el marco de las obras que forman parte del Plan Nacional de Hábitat, se encuentran seis cuadras de reasfaltado de calle Jujuy entre Lamadrid y San José, y seis cuadras de pavimento de hormigón de J.J. Paso, garantizando de esta manera circulación del transporte público. Asimismo, están contempladas 21 cuadras de cordón cuneta, 100 nuevas columnas de alumbrado público y la red troncal de cloacas; cubriendo con así todo el barrio.
Asimismo, está comprendido el mejoramiento del espacio público en el entorno de la vecinal, donde se va a construir el futuro Jardín Municipal en barrio Chalet, y de la plaza Las Américas, en Centenario. Estos trabajos incluyen la construcción de veredas peatonales, bancos de hormigón, iluminación con artefactos LED, colocación de juegos y forestación.

En los barrios

En Arenales y San Lorenzo, el Plan incluye la pavimentación de calle San José entre General López y Monseñor Zazpe, estableciendo de esta manera una conexión vehicular entre los barrios San Lorenzo y Roque Sáenz Peña. Se suma a esto 10 cuadras de pavimento de hormigón, 12 cuadras de pavimento asfáltico, y 44 cuadras de cordón cuneta, lo que permitirá alcanzar con esto todo el sector.

Asimismo, comprende también la construcción de la Estación Elevadora de líquidos cloacales y de 1.200 metros de la cañería de impulsión para conectar a la estación de bombeo existente (Pozo Sur), dejando lista la obra de infraestructura para después conectar a la red cloacal a 600 familias. Finalmente, implica la instalación de otras 250 nuevas columnas de iluminación, con artefactos con lámparas de vapor de sodio de 250 watts de potencia, cubriendo así todo el barrio.