La continuidad de Lavallén en Colón pende de un hilo

En la zona de vestuarios del Tomás Adolfo Ducó, luego de la derrota frente a Huracán por 2-0, José Vignatti bajó de los palcos oficiales con la intención de dar por terminado el ciclo de Pablo Lavallén como entrenador.

Sin embargo, decidió posponer su decisión a un encuentro que tendrían al otro día en el Predio Sabalero, donde el equipo volvería a entrenarse de cara al viaje a Venezuela para el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Sudamericanaante Zulia.

Por lo tanto, la serie ante los venezolanos y el partido ante Gimnasia por la Superliga se tornaban como determinantes para su futuro. Y el entrenador tomó oxígeno con la clasificación a las semifinales, y con el agónico triunfo ante el Lobo.

En varias oportunidades hubo rumores de que los dirigentes ya habían entablado conversaciones con diferentes entrenadores, que comenzaron a picar en punta para suceder a Lavallén, entre ellos Eduardo Domínguez, Ariel Holan y Antonio Mohamed.

El encuentro ante Independiente se presentaba como la gran oportunidad de dar el despegue definitivo, ya que se enfrentaría a un rival que está arrancando un proceso con Sebastián Beccacece como entrenador, y que venía de ser vapuleado por Estudiantes en La Plata.

Para ello Lavallén se inclinó por un equipo donde se prescindió de los laterales de oficio, para incluir a seis volantes, dos de los cuales tenían la misión de comenzar desde la defensa como Fernando Zuqui y Marcelo Estigarribia.

La fórmula no le dio réditos al entrenador, ya que si bien arrancó perdiendo con un tanto en contra de Lucas Acevedo, la realidad es que fue ampliamente superado por un rival que por impericia en la definición no pudo marcar una diferencia más importante desde el resultado.

Otra vez se instaló la incertidumbre en el vestuario visitante, condición donde el Sabalero acumuló 15 partidos sin victorias (15 meses), que se traduce en un promedio muy flaco, lucha donde no se puede dar ventajas debido a la jerarquía de los equipos que luchan por evitar el descenso.

El presidente Vignatti se retiró rápidamente en su vehículo particular, según cuentan con cara de muy pocos amigos, mientras que Lavallén demoró mucho su salida y una vez más evitó el contacto con los medios de prensa.

Este domingo circuló la información que el entrenador sería despedido, con lo cual no se le daría ni siquiera la chance de revertir la historia con el duelo de Copa Argentinao bien en el partido clave por el descenso frente a Rosario Central, del próximo domingo a las 11 en el Brigadier López.

Incluso comenzaron a mencionarse las alternativas que están evaluando los popes rojinegros, donde Eduardo Domínguez es quien pica en punta para volver a tomar la conducción del equipo. Vale recordar que hace un par de días se lo pudo observar en Santa Fe, aunque su presencia se justificó desde el punto de vista familiar, debido a la relación que sus hijos mantienen con algunos establecimientos educativos de la ciudad.

Este domingo por la tarde se produjo un encuentro entre el DT y los directivos donde se habló del momento que está atravesando el equipo. Sin embargo, Lavallén se hizo cargo del entrenamiento, con lo cual queda claro que los partidos ante Sol de Mayo por Copa Argentina y Rosario Central para la Superliga, que se disputarán antes del receso por la fecha de amistosos FIFA de selecciones, serán claves para determinar qué será de su futuro.