Detuvieron a siete narcos que operaban para Los Monos

Por orden del juez federal de Rosario, Carlos Alberto Vera Barros, los policías de Seguridad Aeroportuaria (PSA) detuvieron el miércoles a siete miembros del clan Ruiz, una segunda línea de los Monos, que siguieron con la venta de drogas cuando "Monchi" y "Guille" Cantero cayeron tras varios años de dominar el negocio en la ciudad.

Entre los arrestados estaban tres miembros de la familia Ruiz: "Nico", "Checho" y "Tachán". También arrestaron a tres mujeres que vendían dosis de marihuana. En total, los detectives de la PSA realizaron seis allanamientos en Rosario y dos en Granadero Baigorria. En esos lugares secuestraron un ladrillo de 197 gramos y 135 envoltorios.

El juez Vera Barros abrió la investigación en principio contra Nicolás Ruiz a partir de una denuncia que marcaba un punto de venta de drogas en la calle Polledo, entre Salvat y Oncativo, en el barrio Nuevo Alberdi: era su casa.

El clan Ruiz no era uno más en la banda que dominó el narcotráfico en Rosario. Otro de sus integrantes, Mariano Ruiz, reconoció en 2015 en un juicio abreviado un enriquecimiento ilícito para evitar la cárcel.

Sin embargo, en otro expediente, el juez federal Marcelo Bailaque lo procesó en mayo de este año por lavado de activos de los Monos, lo embargó en $36 millones y le envió la causa a su par de La Plata, Ernesto Kreplak, que investiga si los Monos tenían relación con los exdirigentes del SOEME, Marcelo Balcedo y Mauricio Yebra, imputados por lavado en ese gremio platense.

El año pasado, el Tribunal Oral en lo Penal 1 de Rosario condenó a los líderes de la banda: Ramón Machuca, alias "Monchi, a 37 años de prisión; a Máximo “Guille” Cantero, a 22 años; y también a Agustín Ruiz, a 3 años de ejecución condicional por asociación ilícita y encubrimiento agravado. Agustín es justamente el hermano de Mariano.

Otro tribunal, pero en diciembre, sentenció a prisión a "Guille" Cantero a 15 años de prisión y Jorge Emanuel Chamorro, alias "Ema", uno de los sicarios de la banda, a 17 años. A diferencia del primer juicio, donde los acusaron por asociación ilícita, esta vez los juzgaron por narcotráfico.

Los magistrados dieron por probada la teoría del fiscal federal Federico Reynares Solari: que Cantero y Chamorro "organizaron la venta de drogas desde la cárcel de Piñero" y que, por eso, "sus parejas llevaban las órdenes a la práctica". Entonces, Vanesa Barrios, esposa de "Guille", y Jésica Lloan, pareja de "Ema", fueron sentenciadas a 12 años.

Pero las condenas contra los Monos, como lo demostró la segunda investigación, no marcaron su final. Desde la cárcel se las arreglaban para bajar órdenes a sus segundas y terceras líneas. Una de esas, la del clan Ruiz, fue desarticulada en las últimas horas.