Nuevo toque de queda en Chile: más de 1500 detenidos y al menos 11 muertos

El presidente de Chile Sebastián Piñera decretó este lunes, por tercer día consecutivo, toque de queda nocturno. El objetivo es calmar las incesantes protestas sociales que ya dejaron 11 muertos en ese país. "Necesitamos nuevamente decretar toque de queda, el que regirá para toda la región Metropolitana a partir de hoy a las 20 horas y hasta mañana a las 6", anunció el jefe militar a cargo de la seguridad de Santiago, Javier Iturriaga.

El país a cargo de Sebastián Piñera fue declarado en "estado de emergencia". Hubo incidentes en las calles, barricadas, destrozos y saqueos en los comercios. Esto llevó a que los supermercados decidieran cerrar sus puertas en Santiago. Por eso, este lunes las tiendas se abarrotaron de gente que intentaba abastecerse por miedo a que esto vuelva a ocurrir.

Mientras tanto, en las calles todavía se pueden ver a los manifestantes dispuestos a pelear hasta que su voz sea oída y a las Fuerzas de Seguridad que responden con gases, balas de goma y camiones hidrantes.

11 muertos y más de 1500 detenidos

La Intendencia de la Región Metropolitana de Santiago de Chile, por su parte, informó este lunes que se registran 11 fallecidos en ese distrito durante las manifestaciones en contra del presidente Sebastián Piñera. Asimismo, la Fiscalía anunció el domingo que había un total de 1.554 personas privadas de su libertad, que se encuentran en "audiencia de control de detención". 

Por otro lado, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) de esa nación sudamericana en las últimas horas presentó 11 acciones legales por "violencia policial". En concreto, se trata de ocho querellas contra carabineros y militares junto a tres recursos de amparo para resguardar la "seguridad de personas". Además, instaron a la ciudadanía a que denuncie las irregularidades.

En ese sentido, el INDH ya había alertado sobre "22 personas lesionadas, denuncias de desnudamientos, torturas y malos tratos" por parte de los uniformados. Al respecto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) tomó nota de ello y expresó su preocupación.