El detalle de las obras que se realizarán en 7 de Marzo, Mitre y Candioti con la construcción del nuevo puente

Por Santotomealdía

Junto a la construcción del nuevo puente paralelo al Carretero, el Gobierno provincial realizará una serie de intervenciones muy significativas en el acceso a nuestra ciudad, reorganizando por completo la distribución del tránsito.

El puente existente (Carretero) facilitará el ingreso del tráfico a la ciudad de Santo Tomé, mientras que el nuevo puente se destinará a facilitar el cruce hacia la ciudad de Santa Fe.

Las cuadras a intervenir por Avenida 7 de Marzo, abarcan desde la bajada del puente hasta calle Maciá. Mientras que sobre Bulevar Mitre las cuadras a intervenir son entre Avda. 7 de marzo y 9 de Julio, desde 9 de julio hasta Colon.

En la entrada de la ciudad, en la Avenida 7 de Marzo, se dispuso la conversión de los dos carriles del puente existente a un total de tres, con el objetivo de optimizar el flujo vehicular. Este incremento en la capacidad vial se mantendrá hasta la intersección con la calle Candioti, donde los carriles se reducirán nuevamente a dos. Esta modificación responde a la necesidad de desviar gran parte del caudal vehicular hacia la calle Candioti, la cual se destina exclusivamente al tránsito en dirección sur. Asimismo, se implementará un carril exclusivo para Bicisenda, facilitando el acceso de los ciclistas que ingresen por el puente y continúen por la calle Candioti hacia el sur.

Por otra parte, se planificó un espacio urbano, manda peatón, para los residentes de la cortada Coronda y Candioti hacia el Norte de Avenida 7 de marzo, integrando una ciclovía, una senda peatonal y una calzada destinada al acceso de vehículos a las calles mencionadas. El "manda peatón" es un concepto novedoso en urbanismo que busca equilibrar el uso del espacio entre calles convencionales y aquellas diseñadas exclusivamente para peatones. Este concepto urbanístico es aplicado desde el puente existente hasta calle Falucho.

Desde Candioti hasta el final de la intervención, concretamente en la calle Macia, se establecieron dos carriles para la circulación en sentido este-oeste. Esta medida busca optimizar el flujo vehicular y mejorar la seguridad vial en la zona.

En dirección Oeste-Este, se implementaron tres carriles con el propósito de mejorar la fluidez del tránsito que se incorporará al nuevo puente desde la Avenida 7 de Marzo. Esta infraestructura busca optimizar la circulación vehicular y reducir la congestión en la zona.

Desde Mitre, se realizarán modificaciones que facilitarán la incorporación de vehículos al nuevo puente, permitiendo que los automóviles que provienen de la costa accedan sin interferir en el tránsito comercial de Santo Tomé.

Asimismo, se contempla la reactivación de un tercer carril, lo que ofrecerá un retorno adicional por Bulevar Mitre para los vehículos que llegan desde Avenida 7 de Marzo, garantizando una opción de vuelta antes de alcanzar el puente.

Dentro del marco del proyecto, se prevé la implementación de un circuito de bicisenda que facilitará el cruce entre el puente existente, con dirección Este-Oeste, y el nuevo puente, orientado en sentido Oeste-Este. Se dispondrá una bicisenda para los ciclistas que ingresan a la ciudad, la cual se ubicará paralela a la Avenida 7 de Marzo en la zona designada como manda peatón, extendiéndose hasta Calle Candioti para permitir el acceso hacia el sur por dicha calle. Asimismo, se habilitará una ciclovía paralela a Boulevard Mitre para aquellos ciclistas que se dirijan hacia fuera de la ciudad de Santo Tomé.

En lo que respecta al ordenamiento vial, se implementarán estrategias efectivas que incluyen la ampliación de carriles en las áreas más complejas del tránsito. Además, se proyecta un sistema de semaforización inteligente que tiene como objetivo optimizar el flujo vehicular, minimizando así los problemas de congestión y mejorando la eficiencia del transporte en la ciudad.

Finalmente, el proyecto propone la ampliación del sistema actual de desagües pluviales, incorporando nuevas áreas destinadas a las descargas y reconfigurando los puntos de recepción de caudales generados por el escurrimiento superficial. Con estas mejoras, se busca optimizar la gestión del agua pluvial, minimizando el riesgo de inundaciones y garantizando un adecuado funcionamiento del sistema.