La ciudad espera las Pascuas con adornos para la ocasión
Tal como ocurrió en las fiestas de fin de año, la zona de las cinco esquinas fue decorada con ornamentos elaborados con elementos reciclados. "Estamos muy satisfechas con nuestro trabajo", dijo Lorena Ibarra, una de las impulsoras de la propuesta.
Por: santotoméaldía /
Con motivo de las Pascuas, nuestra ciudad nuevamente fue adornada para la ocasión. Tal como ocurrió en la pasada navidad, se colocaron adornos en la zona de las cinco esquinas.
El proyecto fue llevado a cabo por diez mujeres santotomesinas, lideradas por Lorena Ibarra. Asimismo, cabe señalar que se pudo concretar por la contribución y el trabajo de los vecinos y vecinas de la ciudad, las diferentes vecinales e instituciones locales.
Respecto al armado de las figuras, Ibarra detalló que “en febrero de este año hicimos una reunión y definimos que íbamos a hacer una canasta y huevos para ornamentar las cinco esquinas, luego, a medida que fuimos trabajando, surgió la idea de hacer el conejo de pascuas”.
Tras el armado de la decoración navideña quedaron elementos que fueron reutilizados en esta ocasión. “Además de ese material, juntamos botellas en nuestros domicilios y el Centro Comercial nos ayudó haciendo una colecta en las redes que fue llevada a la vecinal Sargento Cabral”, indicó.
Sobre la respuesta de los santotomesinos a las figuras, Lorena subrayó: “Con los árboles de navidad vimos que la gente cuidaba las figuras y no las vandalizaba. Esperamos que esta vez siga así. Los más chicos son quienes más disfrutan de las figuras. Estamos muy satisfechas con nuestro trabajo”.
Por otra parte, indicó que “esta oportunidad trabajamos solamente un mes, reutilizamos 2.200 botellas y bidones. La logística estuvo a cargo de Rubén Ruzicki, las estructuras y la puesta de la decoración la hicieron Fabio, Walter y Alberto”.
“Entre todos hacemos esto y se hace bien, nos ponemos el objetivo y se cumple en tiempo y en forma”, resaltó.
En busca de un lugar más amplio
Lorena comentó también que la idea del grupo es “seguir trabajando” y “armar algo para la primavera”. En ese sentido, resaltó que lo único que ‘frena’ el proyecto es la ausencia de un espacio propio para poder llevar a cabo las diferentes tareas y sumar gente.
“La vecinal Sargento Cabral nos abrió las puertas y nos brindó ese lugar pero necesitamos un espacio más amplio para sumar más gente y poder ubicar las estructuras más grandes y no moverlas de un lado a otro ya que son pesadas”, señaló y concluyó: “Esperamos que en algún momento se pueda dar”.
