Manu Ginóbili no formará parte del All Star

Con un total de 1.808.860 votos, el bahiense terminó segundo en la elección de la gente -a principios de mes estaba quinto- por detrás de Stephen Curry, que arrasó con 2.379.494 y así ingresa como titular y capitán del equipo de la Conferencia Oeste.

¿Qué pasó, entonces, que se quedó afuera? Manu no pudo pesar en la elección de los periodistas y los jugadores. Entre los medios no cosechó ningún voto y por eso terminó séptimo en ese ranking. Mientras que solo 20 de sus colegas se inclinaron por él y por eso fue octavo en ese listado.

Curry, por su parte, arrasó también entre periodistas y basquetbolistas, con 83 y 146 votos, respectivamente. Segundo, en tanto, entró James Harden, quien quedó tercero entre los fanáticos (1.486.830) pero que quedó segundo entre los jugadores (141 votos) y primero entre los especialistas (94 sufragios).

Igualmente hay que remarcar que al argentino le queda una chance de entrar como suplente. La última posibilidad para que el 20 de los Spurs llegue al fin de semana de las Estrellas sería que lo escogiesen los entrenadores, el martes 23, tal como sucedió en las dos ocasiones en que fue parte del show (2005 y 2011).

En este caso, también hay algunas restricciones para el personal seleccionado: deben ser dos perimetrales, tres internos y otros dos jugadores de cualquier puesto. Ginóbili, entonces, debería ocupar uno de cuatro huecos.

Seguramente, ya elegidos Harden y Curry, será Westbrook quien se quede con uno de esos lugares. Y todavía faltaría considerar a Jimmy Butler, líder de los renovados Timberwolves; Chris Paul, el base que armó una temible dupla con Harden en los Rockets; Damian Lillard y C.J. McCollum (Portland), uno de los backcourts más explosivos de la liga; Devin Booker, el pibe de los Suns que el año pasado le metió 70 puntos a Boston en el TD Garden; y hasta Gary Harris, líder de anotación de los Denver Nuggets (6°).

Cómo se elige quiénes van al All Star

Los quintetos titulares ya no dependen sólo del público. Desde el año pasado, los fanáticos aportan el 50% de los votos, mientras que los propios jugadores y la prensa especializada representan un 25% cada uno.

¿Cómo se contabilizan los sufragios? A través de una simple fórmula: Posición entre el público * 2 + Posición entre los jugadores + Posición entre los periodistas) / 4.

​Esta fórmula da como resultado un coeficiente con el que se ordenan de forma definitiva a los jugadores. Esto evitó que el año pasado, por ejemplo, Zaza Pachulia (quien había terminado segundo entre los hinchas) fuera al All Star, ya que terminó muy atrás en la elección de colegas y prensa.