Provinciales — 27.07.2017 —
Blanco pide que se priorice la producción local de muebles
El diputado provincial reclamó que se dé prioridad a la industria nacional ante el avance de las importaciones.
El diputado provincial Joaquín Blanco expresó su preocupación ante la crisis que atraviesa el sector de la industria nacional de la madera y que afecta en forma directa a nuestra provincia - que en la actualidad representa el 21% de las empresas del sector sobre el total nacional-, especialmente a algunas localidades como Cañada de Gómez, Esperanza, Uranga y Álvarez.
Al respecto, el legislador señaló que “estas ciudades que son dos de los principales puntos de fabricación de muebles de madera del país se ven jaqueadas ante la producción que ingresa desde Brasil y China”.
Según datos oficiales del Observatorio de Importaciones de la Provincia de Santa Fe, durante el primer semestre del 2017, la importación de muebles de madera aumentó un 112% en comparación con el mismo período del 2015.
Por su parte, la Secretaría de Producción de Cañada de Gómez difundió que: “en 2016 se importaron muebles por 15.159.272 dólares, un 53% más que en 2015, cuando se importó por 9.875.070 dólares. Los datos de 2017 van en la misma dirección: entre enero y junio, ingresaron muebles terminados por 6.844.825 dólares”.
Según Blanco “esta es una situación que ya no sorprende, lo mismo padecen las fábricas de calzado y otros sectores claves en el desarrollo industrial de nuestra provincia, en relación a lo cual nos venimos expresando con gran preocupación tanto desde la Legislatura como desde el Ejecutivo”.
El legislador socialista solicitó que el Ministerio de Producción de la Nación arbitre las medidas necesarias para el fortalecimiento de las economías regionales y las pequeñas y medianas empresas, que se quedan sin herramientas ante los sectores más concentrados y la apertura indiscriminada a las importaciones.
“Hay cinco o seis empresas importadoras que sacan rédito en detrimento de otras miles que están haciendo lo posible para sostener los puestos laborales, pero ya no hay más horas extras, muchos contratos no se renuevan, el poder adquisitivo de los trabajadores repercute en el consumo y, por lo tanto, en la actividad de los diferentes rubros de las economías locales”, concluyó.