Internacionales — 24.02.2025 —
Haití: murió un oficial de Kenia, integrante de la fuerza multinacional de apoyo
En el convulsionado país más pobre del mundo, una multitud indignada habría asesinado a dos presuntos pandilleros el fin de semana.
Fuente: Noticias Argentinas
Un oficial keniano de la Fuerza Multinacional de Apoyo a la Seguridad en Haití (MSS) murió en las últimas horas durante una operación conjunta con la Policía Nacional de Haití (PNH) contra las bandas armadas, informaron medios internacionales. El oficial fue herido en Pont Sonde, en el municipio de Saint-Marc, en el departamento de Artibonite, a unos 100 kilómetros de Puerto Príncipe, y posteriormente fue trasladado a un hospital donde "lamentablemente sucumbió a las heridas", de acuerdo con un comunicado de la MMS, que no identificó al fallecido.
Este es el primer efectivo de la MSS que falla tras el despliegue de la misión en junio pasado para ayudar a Haití a combatir la violencia que imponen las bandas armadas, las cuales controlan el 80 por ciento de la capital del empobrecido país caribeño. El oficial resultó herido en el marco de un operativo que varias unidades de la Policía Nacional de Haití, entre ellas la Brigada de Intervención Motorizada (BIM) y la Unidad Temporal Antipandillas (UTAG), apoyadas por el MSS, llevaron a cabo una operación en la base de los grupos armados en Pont Sonde.
Este domingo, decenas de personas se manifestaron en contra de la inseguridad en varios barrios del área metropolitana de Puerto Príncipe, entre ellos Canapé-Vert, Fort National y Turgeau, informó el sitio dw. Se informó además que varios supuestos pandilleros fueron linchados por civiles e incluso la agencia de noticias EFE confirmó la muerte de dos de los supuestos marginales.
A principios de octubre de 2024, más de 70 personas fueron asesinadas en una masacre perpetrada por el grupo armado de Grand Griff con base en Savien, en la zona de Pont Sonde. Al menos 5.601 personas murieron en Haití en 2024 como consecuencia de las acciones de bandas criminales, un millón más que el año anterior, lo que demuestra que la violencia se agudiza, según informaciones verificadas por la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Además, 2.212 personas resultaron heridas y 1.494 fueron secuestradas, según las cifras de la oficina, con sede en Ginebra.