Lombardía y el Véneto tuvieron su referéndum en Italia

En medio de la preocupación por Cataluña, tal como se esperaba, dos regiones del próspero norte de Italia, Lombardía y el Véneto, dijeron ayer que sí, que quieren más autonomía, al votar en un referéndum consultivo y no vinculante que no tendrá ningún efecto inmediato.

"Es una página de historia que se escribe, el Véneto ya no será más el de antes, pero esto no tiene nada que ver con Cataluña", proclamó Luca Zaia, gobernador del Véneto, de la Liga Norte, donde el sí superó cómodamente el umbral de la mitad más uno que se necesitaba para que el referéndum tuviera validez.

En la vecina Lombardía, también en manos de la Liga Norte -agrupación de derecha y xenófoba que dejó en el arcón el sueño de la "Padania" independiente-, no era necesario ningún quórum. Pero según datos provisorios apenas había superado el 31,8%, un resultado decepcionante dado que el gobernador de la región, Roberto Maroni, había dicho que iba a considerar una victoria superar el 34% del quórum.

Tanto Zaia como Maroni, que fueron ministros durante el gobiernos de Silvio Berlusconi, prometieron abrir a partir de hoy formalmente negociaciones con el Estado central para obtener "ulteriores" formas de autonomía. El objetivo principal es arrancarle competencias sobre todo en lo que tiene que ver con los impuestos.

Con unos 10 millones de habitantes, Lombardía, cuya capital es Milán, nodo financiero de Italia, tiene un PBI de 357 mil millones de euros y un PBI per cápita de 35.800 euros. Con 4,9 millones de habitantes, el Véneto tiene un PBI de 152 mil millones de euros (el 9% del PBI italiano) y un PBI per cápita de 30.800 euros.

La Liga Norte, hoy liderada por Matteo Salvini, espera llegar al gobierno en las elecciones que tendrán lugar en marzo que viene, en las que se presentarán aliadas a Forza Italia, el partido de Berlusconi y otras fuerzas de derecha. En este marco, algunos analistas creen que, con su victoria en el referéndum de ayer en el bolsillo, Zaia podría aspirar a ser el candidato a primer ministro de esa coalición. Aunque ha reaparecido en el escenario y está haciendo campaña, Berlusconi, de 81 años, no puede ser candidato debido a una condena por fraude fiscal.